Ámate primero a ti mismo

Esto no parece casi nada nuevo, es como algo recocido, como «ya he pasado por eso».

Me refiero al tema de este artículo: Ámate primero a ti mismo.

Pero no lo es.

¿Sabes por qué? Porque la gente sigue sin hacerlo. La mayoría no hemos aprendido todavía el viejo adagio aquel de que si no nos amamos primero a nosotros mismos, no podremos amar realmente a nadie más.

¿Sabes por qué? Porque los estarás amando por las razones equivocadas. Ya, creerás que los amas, y en cierto modo así es, pero los amas por razones equivocadas.

Algunas de dichas razones son:

• Cuando estoy con él (o ella) soy muy feliz.
• Me hace sentir muy bien.
• Cuando no estamos juntos, simplemente no disfruto de verdad con lo que hago.
• Cuando no estamos juntos, siento que me falta una parte de mí.
• Cuando no estamos juntos, me siento muy perdido (o perdida).
• Nunca antes me había sentido así... solo él (o ella) puede hacerme sentir así.
• Lo (o la) necesito tanto. (En este ejemplo, la persona realmente cree que necesitar a alguien es una prueba de que lo ama. ¡Uf!)
• Me siento muy seguro/a cuando estoy con él (o ella).
• Lo (o la) necesito tanto. (En este ejemplo, la persona realmente cree que necesitar a alguien es una prueba de que lo ama. ¡Uf!)
• Nunca antes me había sentido así... solo él (o ella) puede hacerme sentir así.
• Cuando no estamos juntos, me siento muy perdido (o perdida).
• Cuando no estamos juntos, siento que me falta una parte de mí.
• Cuando no estamos juntos, simplemente no disfruto de verdad con lo que hago.

¿Empiezas a entenderme? Todas estas situaciones son indicativas de alguien que está enamorado debido a algo que le proporciona la persona a la que ama. Por esa razón los dos están enamorados. Obviamente, este no es un proceso - casi como si fuera materialista - consciente. Sencillamente sucede. Nos damos cuenta de que nos sentimos mejor cuando tenemos cerca a la persona que amamos. Empezamos a definir por qué nos sentimos mejor cuando tenemos cerca a esa persona. De ahí afirmaciones como las anteriores. Y después, ¡sorpresa!, creemos que estamos enamorados.

Sin embargo, no todo está perdido. En otras palabras, si aún estás conmigo, esto no significa que ahora debieras dejar tu relación para encontrarte a ti mismo y descubrir cómo amarte primero a ti mismo. Pero sí significa que ahora deberías empezar a darte cuenta de que todas estas razones que te hacen creer estar enamorado apuntan a aquellas partes de ti que todavía no has llenado por ti mismo. Por esa razón las intentas satisfacer a través del otro.

Cuando empiezas a satisfacer tú mismo tus necesidades, comienzas el proceso de amarte a ti mismo, a respetarte, a tener autoestima, y a darte autorreconocimiento. No se trata de egoísmo o un comportamiento egotista.

Hacer esto, despertar con respecto a ti mismo, te conducirá a un lugar —cuando finalmente ames— donde amarás como jamás fuiste capaz de amar cuando aun te hacía falta que otro satisficiera tus necesidades.

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